VEEDURIA CIUDADANA PARA EL SISTEMA GENERAL DE RIESGOS PROFESIONALES (LABORALES)

Se informa a todos los actores del Sistema General de Riesgos Profesionales (LABORALES) de la existencia, la vigencia y la actuación de la Veeduría Ciudadana para el SGRL. , en cabeza del Dr. Carlos Arturo Grisales Rojas, medico cirujano, Magister en Salud Ocupacional de la Universidad del Valle, que desde el año 2001 es el Veedor Delegado para el Sistema General de Riesgos Profesionales (Laborales) y para el Consejo Nacional de Riesgos Profesionales (Laborales). El Dr. Grisales es el presidente de la Veeduría Ciudadana para la Seguridad Social Integral Proseso (pro- Seguridad Social) creada en la ciudad de Cali en PROMEDICO Fondo de Médicos de Colombia el 1 de febrero del 2001 y registrada en la Personería Municipal de Cali con el registro # 45.


La misión de la Veeduría Proseso es realizar el control Social al Sistema de Seguridad Social Integral en todos sus regímenes: Salud, Pensiones, Riesgos Profesionales (Laborales) y Servicios Complementarios, la visión: Hacer veeduria preventiva al mas alto nivel donde se planea, decide y administra el Sistema de Seguridad Social, crear una Red de Veedurías para cada Sistema, con el fin de tener una vigilancia y un control que hagan más eficiente y justa la Seguridad Social, promocionado y gestionando una Cultura Ciudadana de Participación, velando porque en el caso del SGRP. este cumpla con los principios y las reglas del fundamento del servicio publico en Seguridad Social y el objeto y los objetivos planteados en la ley 100 de 1993 y particularmente en cada uno de sus regímenes.


El contacto con el Veedor Delegado para el Sistema General de Riesgos Profesionales (Laborales) para conocer mayores detalles sobre las actuaciones de la Veeduría, para formar parte de la Red o para poner en conocimiento irregularidades en el SGRL. puede hacerse en:


http://pro-seguridadsocial.blogspot.com, y el e-mail proseguridadsocial@gmail.com . cel. 3113725288


miércoles, 10 de octubre de 2012

!!!! CUIDADO !!!! CON EL CONSUMO DEL YAGE

RIESGOS DE LA TOMA DE YAGE (Soga de los muertos)

El yagé es una planta originaria de la amazonia, crece en su piedemonte y es utilizada ancestralmente por algunas culturas indígenas en ritos sagrados y de curación, es administrada por vía oral, luego de ser preparada en cocimientos de varias horas con otras plantas que le dan poder a la amarga bebida.

Desde hace algún tiempo se ha venido popularizando las experiencias de consumo de yagé en las ciudades en personas que no pertenecen a las etnias indígenas del amazonas, que la conocen y usan de manera milenaria. En muchos casos hacen tomas de esta “droga de poder” por simple curiosidad o por moda, otros por sus comentadas propiedades medicinales, propiedades relacionadas con la espiritualidad, por la opción de conocimiento y por la búsqueda de diversión y de experiencias que lo saquen de lo habitual.

Los efectos comienzan una media hora después de haberla bebido: Pupilas dilatadas, vértigo, sudores, nervios, es muy frecuente el vómito y la diarrea, afecta la capacidad de razonamiento, puede provocar variaciones en el estado de ánimo y en las emociones, afecta a la percepción sensorial, se pueden ver los colores más brillantes y formas a modo de caleidoscopio, alucinaciones. Se le atribuyen capacidades enteogénicas, es decir, de armonía con uno mismo y conexión con Dios o alguna fuerza superior.

Al vivir una toma de yagé y sus efectos en el cuerpo y la mente se corren riesgos que pueden poner en peligro la salud física y mental, dependiendo de su estado previo y al momento de la toma, de si ha tenido una adecuada preparación para la toma que incluye preparación del cuerpo y de la mente, de si tiene información clara sobre el tema en relación a lo que se debe conocer antes, lo que se va a vivir durante la toma y posterior a ella, de si la toma esta o no dirigida por expertos en el conocimiento de este poderoso alucinógeno y del manejo de las circunstancias de la toma y de las experiencias individuales de los tomadores.

El yagé afecta el sistema nervioso central, produciendo estados alterados de conciencia, alucinaciones que hacen ver y vivir experiencias como si fueran reales; estos viajes y visiones son de diferente tipo de acuerdo al estado personal, con sonidos, colores, formas y desplazamientos a velocidades insospechadas, y vivencias y sensaciones que pueden ir desde vivencias lúdicas hasta místicas, desde experiencias agradables y placenteras hasta terroríficas, desde experiencias de vida hasta experiencias de muerte. Se pueden revivir y remover realidades ya vividas guardadas al interior del subconsciente, escondidas en sus profundidades, sintiendo sentimientos de culpa, de frustración, de angustia, de desasosiego o lo contrario con experiencia agradable, tranquilidad y bienestar.

Viajas por el universo donde ves contrastes de luz, oscuridad y color, oyes el sonido de la inmensidad infinita del universo, sientes el vértigo del viaje con aceleración y desaceleración brutal; te zambulles al interior de tu ser y tu conciencia reviviendo experiencias, acompañadas de los sentimientos y sensaciones que te produjeron y vives su análisis crítico y concienzudo, la auto calificación de tus faltas, fallas, excesos, equivocaciones y omisiones, respondiendo tu mente y cuerpo a las experiencias revividas orgánica y fisiológicamente, alterando tu química con descargas de adrenalina que llevan tu cuerpo a ritmo de taquicardia, hiperventilación, cambios de tensión arterial, estrés físico y mental, esto sumado sumada a los efectos propios de la droga en el organismo.

Tomar ayahuasca o yagé es un boleto a lo desconocido, a una experiencia incierta sin garantía de que sea placentera, sin garantía de seguridad y con riesgos que son individuales a cada psiconauta. Estos riesgos van desde el riesgo de morir en la toma, hasta quedar en estados alterados de conciencia de manera temporal o definitiva.

Si bien una toma hecha con un chamán experimentado te da alguna garantía de seguridad, la garantía no es total, el riesgo está presente en cada persona que viaja con yagé. El chamán experimentado conoce el manejo de los tomadores de yagé, desde el exterior; el examina y valora al individuo desde su comportamiento y signos externos: movimientos, posturas, actitudes, color de la piel, sudoración, ritmo respiratorio, pero al interior del psicoanuta, a su viaje, nadie puede acceder, solo imaginar por experiencias propias o recogidas de los relatos de viajes de otros; con esos elementos de juicio y con los conocimientos ancestrales el chamán ayuda a modular el viaje y a controlar los efectos del yagé sobre la mente y el cuerpo y los de la mente sobre el cuerpo para tratar de que el viaje sea una experiencia tranquila y placentera con riesgos controlados en lo posible, evitando accidentes en la toma, que pueden ir desde traumas o golpes hasta desequilibrios hidroelectrolíticos por la diarrea y el vómito, crisis hipertensivas, infartos, paros cardio respiratorios y muerte.

Realizada la toma e iniciados sus efectos el viaje no tiene regreso, ni se puede parar ni abandonar a voluntad hasta el final de su efecto, que puede estar entre 2 a 6 horas; el instrumento de control del viaje lo tiene el chamán al menos para los viajeros no experimentados, es el poder del verbo de la palabra y el sonido encarnado en los Icaros cantos rituales con los que el chamán ayuda a modular la actividad mental y cerebral del viajero y el ritmo del funcionamiento del organismo.

Si el viajero esta “arisco” excitado física y mentalmente: ansioso, asustado, angustiado, estresado, paniquiado, viviendo experiencias de muerte, de alucinaciones con atomización o desintegración de su cuerpo, taquicardia alteraciones de sus signos y ritmos vitales, la manear de modularlo es con los Icaros o cantos chamanicos ,que aquietan la mente y el cuerpo en alguna medida, si no pudiese controlar esta situación el chamán no tiene los conocimientos para manejar una crisis hipertensiva, una arritmia, una fibrilación, un paro cardio respiratorio y el viajero puede morir.

Además el chamán desconoce los antecedentes y el estado de salud físico y mental que aumenta el riesgo durante el viaje y posterior a él; personas con antecedentes de hipertensión, patologías cardio respiratorias, pueden comprometer su salud gravemente o aun morir, personas con alteraciones de la personalidad y enfermedades mentales larvadas o presentes pueden iniciarse o agravarse, psicotizarse o enloquecer.

El riesgo aumenta al tomarlo con falsos chamanes o sin acompañamiento de un chamán experimentado, aumenta con la dosis y/o con la calidad del brebaje o pócima.

El consumo de yagé ha salido de la selva amazónica y de las comunidades indígenas que lo han usado ancestralmente a las ciudades donde el desconocimiento de estas “plantas de poder”, sus efectos, usos y riesgos son desconocidos; popularizándose poco apoco en una sociedad curiosa, ávida de experiencias nuevas, fuertes y diferentes y esperanzada en encontrar curas mágicas a las enfermedades por la vía del menor esfuerzo y compromiso, sin medir los riesgos.

Es un llamado de alerta y prevención dirigido a los chamanes, a los psiconautas y a las personas en general a a mirar con respeto, cuidado y precaución el uso del yagé, también llamado “soga de los muertos”, planta de poder.


CARLOS GRISALES ROJAS MD. MSO.
SALUD OCUPACIONAL & MEDICINAS ALTERNATIVAS IPS.